El descargo del ex atleta Federico Molinari tras la denuncia por acoso a alumna

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El gimnasta olímpico, hizo un comunicado en el que aclaró que se puso a disposición de la Justicia desde que tomó conocimiento y que aún no fue citado. Además, habla de los problemas de la denunciante con otras academias.

Veinticuatro horas después de que salió a la luz la denuncia por grooming contra el ex atleta olímpico Federico Molinari, el propio gimnasta salió a aclarar su situación. Fue a través de un comunicado al que tuvo acceso Clarín y en el que aclaró que se puso a disposición de la Justicia desde que tomó conocimiento de la situación y que aún no fue citado por la Fiscalía de San Isidro

Molinari, finalista olímpico en anillas en los Juegos de Londres 2012, fue denunciado en el Departamento Judicial de San Isidro por una menor de edad que era alumna en una de sus escuelas. De acuerdo a lo conocido el martes, la denuncia se radicó el 13 de marzo y tanto el ex atleta como su esposa Paula Cancio fueron separados de sus cargos en la Federación Bonaerense de Gimnasia.

Lo primero en lo que hizo hincapié Molinari es que la denuncia por grooming nada tiene que ver con “ningún tipo de abuso ni contacto físico con la menor, sino que hace referencia a aparentes mensajes inapropiados”. “De todas formas, niego enfáticamente haber remitido mensaje alguno con contenido o sentido sexual. Siempre tuve un cordial vínculo con la alumna y los contactos que he mantenido con ella han estado destinados a acompañarla y levantarle el ánimo en momentos difíciles que ha tenido. Lamentablemente, la realidad ha sido tergiversada”, afirmó.

La denunciante contó que el “grooming” a su hija habría comenzado en 2020 a través de las redes sociales, después de que viajara junto a su hija desde Mendoza a Buenos Aires con el objetivo de mejorar su rendimiento en el deporte que la apasiona. Y tuvo a Cancio como entrenadora, recordó Clarín.

La madre denunció que hubo mensajes en Instagram, primero suaves y luego ya con insinuaciones. Y que incluso una vez el ex gimnasta saludó a todas las chicas con el puño y a su hija la habría tomado de la cintura y saludado con un beso en la mejilla.
Según Molinari, el relato de la denunciante “está repleto de inexactitudes y confusiones y que difiere en gran parte de una denuncia administrativa que ella había efectuado anteriormente ante la Federación bonaerense de Gimnasia”.

En ese sentido, el ex atleta olímpico aclaró que decidió “dar un paso al costado provisoriamente” de ese cargo, tal como había trascendido.
La Justicia realiza una investigación preliminar y mandó oficios a Instagram para chequear los mensajes remitidos. Molinari no fue citado, pero trascendió que él y su mujer fueron apartados de la Federación Bonaerense de Gimnasia.
“La Justicia, en la que confío plenamente, está analizando los mensajes y no dudo que se concluirá que no he cometido delito alguno”, completó el comunicado de Molinari.

El comunicado completo de Federico Molinari

Escribo estas líneas acompañado de mi mujer Paula Cancio.
En primer lugar, quiero decir que en cuanto tomé conocimiento de la denuncia penal que me involucra (no así a Paula) me presenté a la Justicia con mis abogados y al día de hoy no he sido citado y continúo a disposición.

Se trata de una denuncia efectuada por una madre de una ex alumna de 16 años -que era entrenada por Paula-, por un supuesto caso de “grooming” de mi parte. Es importante aclarar que eso no implica ningún tipo de abuso ni contacto físico con la menor, sino que hace referencia a aparentes mensajes míos inapropiados. De todas formas, niego enfáticamente haber remitido mensaje alguno con contenido o sentido sexual. Siempre tuve un cordial vínculo con la alumna y los contactos que he mantenido con ella han estado destinados a acompañarla y levantarle el ánimo en momentos difíciles que ha tenido. Lamentablemente, la realidad ha sido tergiversada.

La Justicia, en la que confío plenamente, está analizando los mensajes y no dudo que se concluirá que no he cometido delito alguno.
Teniendo en cuenta que la causa ha tomado estado público y que la denunciante ha efectuado declaraciones en algunos medios de prensa, me veo en la obligación de decir que el relato de la Sra. está repleto de inexactitudes y confusiones y que difiere en gran parte de una denuncia administrativa que ella había efectuado anteriormente ante la Federación bonaerense de gimnasia -de la cual decidí dar un paso al costado provisoriamente, hasta que esto se resuelva-.

Creo muy relevante decir que, hace más de un año, cuando la madre conoció los mensajes cuestionados, la menor continuó entrenando en nuestra institución por mucho tiempo y ambas siguieron manteniendo una cordial relación conmigo, de lo cual tengo sobradas pruebas –mensajes, etc.-. Por eso tuve una enorme sorpresa cuando apareció esta denuncia penal.
Reitero que mi esposa Paula no ha sido denunciada en la causa, como inexactamente trascendió. No obstante, cierto es que la menor tuvo alguna discrepancia con ella, pero estrictamente relacionada con el entrenamiento en sí. De todas formas, la Sra. y su hija mantuvieron con Paula una correcta relación hasta que decidieron abandonar nuestra escuela.

Me veo también obligado a decir en mi defensa que la denunciante ha tenido inconvenientes en dos instituciones de gimnasia en las que su hija entrenó anteriormente. Asimismo, mientras la menor era entrenada por mi esposa y también por otro profesional se han suscitado problemas que no viene al caso mencionar, pero nosotros siempre priorizamos la salud de la alumna.

Por otra parte, quienes me conocen saben de mi trayectoria, mi pasión por el deporte y la docencia y, especialmente, que soy incapaz de cometer cualquier tipo de abuso o exceso con un alumno. He tenido más de 5.000 alumnos que han pasado por nuestra escuela –siempre con libre acceso a las clases para los padres- y jamás tuve inconveniente alguno como el que motivó esta denuncia.
Quiero agradecer muy especialmente el apoyo que he recibido en estos días de alumnos, padres, colegas, amigos, etc.

Sabrán comprender que prefiero no hablar en los medios ni dar notas. Entiendo el interés de la prensa, pero se trata de un tema delicado que involucra a una menor y que ya está en manos de mis abogados y en especial de la Justicia, cuya decisión aguardo.
Mi mujer Paula ha sido testigo presencial de muchas situaciones, conoce la realidad y me acompaña incondicionalmente.
Por ella, por mis hijos y por todos ustedes –además de por mi buen nombre y honor-, aguardo una rápida y clara resolución de la Justicia.

FEDERICO MOLINARI – PAULA CANCIO

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