Radicalismo K: Martín Lousteau se asoció a Unión por la Patria para que se tratara el DNU

Compartir esta información

También, con los gobernadores. La moción fue rechazada con 41 votos. Se sumaron Espínola, Kueider y referentes de Río Negro, Neuquén y Santa Cruz.

El oficialismo no consiguió posponer veinte días el tratamiento del decreto de necesidad y urgencia 70/23, conocido como decretazo. Una moción del oficialista Ezequiel Atauche fue rechazada por 41 votos a 30, cuatro más que la mayoría. Votaron en contra los 33 miembros de Unión por la Patria, referentes de partidos locales y el radical Martín Lousteau.

El presidente del partido centenario tiene decidido oponerse al DNU, como dejó entrever en el comunicado emitido el lunes por el Comité de la UCR. También pidieron sostener su tratamiento los santacruceños Natalia Gadano y José Luis Carambia, cuyo posicionamiento fue clave para inclinar la balanza.

Pulsaron el botón rojo, además, la neuquina Lucila Crexell (aliada del gobernador Rolando Figueroa), la rionegrina Mónica Silva (cercana al mandatario Alberto Weretilneck y la chubutense Edith Terenzi, radical y aliada del gobernador de Chubut, Ignacio Torres.

Completaron la lista de votos negativos Carlos Espínola Edgardo Kueider, quienes integran el bloque Unidad Federal junto a la cordobesa Alejandra Vigo, que no apoyó la moción de posponer el debate y luego anunció que se abstendrá.

Sólo Martín Lousteau

Las gestiones de la Casa Rosada fueron insuficientes, pero surtieron efecto: respaldaron la idea de sostener el DNU la dupla misionera (Carlos Arce Sonia Rojas Decut), que responde al líder local, el legislador provincial Carlos Rovira.

Otro dato favorable para el Gobierno es que a Lousteau, decidido a quedarse con la franquicia de “las banderas radicales”, incluso a costa de asociarse con el kirchnerismo en la dinámica legislativa, no lo acompañó nadie en su bloque. Ni siquiera el fueguino Pablo Blanco, quien hace 15 días firmó una nota para pedirle a Villarruel tratar el decretazo en el recinto En su discurso, Blanco rechazó el DNU y contó que fue presionado por los gobernadores radicales Alfredo Cornejo (Mendoza) y Gustavo Valdés (Corrientes). También dijo que lo llamaron empresarios de su región, dónde está el polo tecnológico más grande del país.

Los misioneros y Vigo también habían firmado la nota enviada a Villarruel para apurar la sesión, pero este jueves juegan con el Gobierno. No es el primer gesto de Córdoba: este miércoles dejó tres bancas vacías en Diputados para evitar que se tratara el proyecto de movilidad jubilatoria.

Un punto en contra para el Gobierno fue que Unión por la Patria votó sin fisuras, como anticipó Letra P. Respaldaron apurar el tratamiento del decretazo representantes de los gobernadores Osvaldo Jaldo (Tucumán), Raúl Jalil (Catamarca) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero), en quienes más confiaban los operadores del Gobierno.

El debate

Tras el frustrado intento del oficialismo de levantar la sesión, se espera un debate de más de siete horas y una votación no muy distinta.

Para justificar su propuesta de demorar el DNU, Atauche, quien el miércoles estuvo en la Casa Rosada, aludió a la negociación entre el presidente Javier Milei y los gobernadores. “Argentina tiene que unirse. Se ha llamado a la unión y al diálogo”.

Lo cruzó José Mayans, jefe de UP. “Este DNU deroga 70 leyes y modifica 300; está generando efectos jurídicos. No tiene que ver con la negociación que hay con gobernadores”.

Una de las primeras oradoras del peronismo, Anabel Fernández Sagasti, aclaró que los DNUs no requieren una mayoría de dos tercios en el Congreso si llegan al recinto sin dictamen. “Hay antecedentes”, aclaró. Teme que sea la próxima jugada del Gobierno.

Compartir esta información