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Por los congelamientos generalizados que aplicó el ministro candidato tras la devaluación de agosto, logró bajar del 12% de ese mes y de septiembre. Comunicación, ropa, calzado y equipamiento y mantenimiento del hogar fue lo que más subió. En noviembre se espera una nueva aceleración tras las elecciones del domingo, por impulso del dólar oficial, las prepagas, la nafta y los ítems de Precios Justos.
Se conoció el último dato de inflación antes de que el ministro de Economía, Sergio Massa, se exponga a las urnas en el balotaje del domingo ante el economista ultralibertario que se hizo famoso en televisión por sus arranques de furia contra las subas de precios, Javier Milei. Fue un poco menor al 12% de agosto y septiembre, los mayores niveles mensuales de los últimos 32 años, pero tampoco dio para festejar. Ascendió al 8,3% en octubre y acumula un 142,2% interanual, el mayor índice desde septiembre de 1991, cuando el país salía de su última hiperinflación. En los primeros nueve meses del año suma un 120%.
La comunicación (con alza del 12,6%), la ropa y el calzado (11%) y el equipamiento y el mantenimiento del hogar (10,7%) fueron los rubros que más se encarecieron el mes pasado. En cambio, los sectores donde rigen acuerdos o regulaciones de precios fueron los que aumentaron menos: salud (5,1%), educación (6,6%), transporte (7,1%), alimentos y bebidas no alcohólicas (7,7%) y alquileres, agua corriente, luz y gas (7,8%).
Entre los alimentos que más se remarcaron figuran algunos básicos para la población: galletitas dulces (10%), arroz -cuya variedad faltó en las góndolas- (35%), fideos (32%), pollo (10%), salchichón (12%), limón (23%), lechuga (40%), tomate (24%), arvejas (14%), azúcar (15%), sal (16%), gaseosa (10%), agua (12%), cerveza (15%), detergente y lavandina (12% ambos) y algodón (11%). Varios de estos productos están incluidos en Precios Justos, por lo que en las grandes cadenas de supermercados no deberían subir más del 5% mensual… Pero los pactos se incumplen, se escapan al control del secretario de Comercio, Matías Tombolini, y además no rigen los supermercados chinos y almacenes. Pero por más que la inflación sea alta Massa sigue competitivo ante los comicios porque enfrenta a Milei y sus amenazas a la economía y la democracia. Sólo así se explica que el ministro de Economía pueda vencer.
“Descontábamos un registro más bajo de inflación para este mes”, analiza Melisa Sala, economista jefa de la consultora LCG. “La suba de 8,3% de octubre implica una merma de más de 4 puntos contra el dato de septiembre. La desaceleración se dio en prácticamente todos los componentes: estacionales, regulados y núcleo. Pero fue más significativa en esta última, con una desaceleración de 5 puntos, recortando 3,2 puntos de inflación total. Es que el Gobierno sostuvo un congelamiento amplio de precios de bienes y servicios buscando frenar la escalada que se dio en los meses anteriores que absorbieron de lleno el traslado, cada vez más rápido, de la devaluación post PASO (primarias abiertas simultáneas y obligatorias). No obstante, no somos optimistas en cuanto a que el descenso se sostenga en el tiempo; más bien entendemos que se trata de un nuevo piso, siempre más alto que el anterior, de 6% en junio y julio. Una inflación núcleo navegando en 8,8% mensual es muy preocupante: en términos anualizados equivale a una tasa del 175%”, continúa Sala.
“Para noviembre esperamos nuevamente una aceleración de la inflación minorista”, analiza la economista de LCG. “Después de las elecciones del domingo deberían empezar a descongelarse alguno de los precios reprimidos hasta ahora, entre ellos el dólar oficial, cuotas de medicina prepaga, combustibles y los incluidos dentro del programa Precios Justos. Aun de avanzar en un descongelamiento ordenado, sin disparada de los dólares paralelos por la incertidumbre propia que genera cualquier cambio de gobierno, esperamos un registro de inflación por encima de los dos dígitos en noviembre”, finaliza la analista.
Florencia Iragui, también de LCG, completa el análisis: “Mirando un poco el desglosado del Indec (Instituto de Estadística), la inflación desaceleró ya que estacionales acompañaron este mes: +7,6% en octubre v. 14,7% en septiembre, y los regulados también hicieron lo suyo: 6,6% v. 8,3% en septiembre. A nivel general todas la categorías desaceleraron, excluyendo comunicaciones, que subió un 12,6% este mes respecto al anterior. Alimentos que tiene un fuerte peso en el índice general, el 27% del índice, fue la categoría que más desaceleró, aumentando este mes un 7,7% mensual luego de encontrarse dos meses por encima del índice general”.
“Se esperaba 9,3 o 9,5%”, admite Hernán del Villar, de la consultora Alpha. “Más desaceleración de los esperado en estaciónales y regulados. La inflación núcleo, aproximadamente en lo esperado”, agrega Del Villar. En tanto, su colega Hernán Hirsch explica que “básicamente pisaron el dólar, las tarifas, los combustibles y otros precios regulados y además los productos estacionales y la carne vacuna moderaron su alza”.
