¿Qué está pasando?
En el barrio Namqom de la capital provincial de Formosa, una denuncia pública (y documentada en vídeo) exhibe la presencia de un “acompañante serial” en un centro de votación que ingresaba repetidamente con distintos electores, lo cual genera dudas graves sobre la transparencia del acto electoral. El Comercial+1
Se trata de una anomalía que exige investigación inmediata, ya que pone en riesgo el principio de voto libre y secreto.
Antecedentes: un patrón de autoritarismo institucional
- La provincia de Formosa es gobernada hace décadas por el mismo liderazgo peronista encabezado por Gildo Insfrán, bajo el sello del Partido Justicialista (“Frente para la Victoria”). Según reseñas tradicionales, esta gobernación ha sido tildada de “feudal” por críticos que denuncian clientelismo, falta de transparencia y manipulación del poder provincial. Wikipedia+1
- Se reportan múltiples denuncias de irregularidades en el pasado, incluida la imposición de estructuras de dominación política, el uso de recursos del Estado como herramientas de campaña y la falta de control institucional efectivo.
- En el actual proceso electoral nacional de 2025, se han cursado al menos seis denuncias formales en Formosa por violación a la veda electoral, lo que evidencia que el marco legal y normativo electoral está siendo vulnerado. El Destape+1
El hecho puntual en Namqom
La denuncia describe que en el centro de votación del barrio Namqom un hombre entró sistemáticamente como “acompañante” con varios votantes, lo que en sí mismo viola las normas electorales que prohíben el acompañamiento indiscriminado y el ingreso reiterado de personas no autorizadas. Según el diario local, “una persona filmó a un hombre que ingresó varias veces al centro de votación, acompañando a quienes iban a votar. ‘Este hombre es un acompañante serial, no puede hacer eso … lo vengo filmando’, indicó”. El Comercial+1
La diputada provincial Gabriela Neme denunció además agresiones en el exterior del centro de votación, atribuidas a militantes del gobierno provincial, lo que agrava el cuadro de presión sobre la libertad de elección. El Comercial
Por qué esto tiene que escalar a intervención federal
- Cuando un estado provincial muestra signos de captura estatal, en el que la misma fuerza política domina los tres poderes —ejecutivo, legislativo y judicial— y se documentan prácticas que afectan el derecho al sufragio libre, se abre la puerta a que se evalúe la intervención de la justicia federal según los preceptos del sistema democrático argentino.
- La Constitución Nacional en su artículo 99 y el código electoral nacional contemplan la garantía del voto universal, secreto y libre; si se demuestra que estos derechos están siendo vulnerados sistemáticamente, se impone la intervención urgente de instancias federales: Justicia Federal Argentina, Tribunal Electoral Nacional, la Corte Suprema de Justicia de la Nación y la Defensoría del Pueblo de la Nación —también la intervención de entes de control internacional si hiciera falta.
- Esta provincia ha sido señalada previamente por restricciones a la libertad de prensa, concentración de poder y denuncias por fraude en elecciones pasadas. Wikipedia+1
Qué hay que exigir AHORA
- Que la Justicia Federal intervenga inmediatamente en la provincia de Formosa: que se articulen auditorías independientes del padrón, del conteo de votos y de la instalación de las mesas en barrios vulnerables como Namqom.
- Que se garantice la presencia plena de fiscales de oposición y observadores internacionales/neutrales en todas las mesas y centros de votación de la provincia.
- Que se suspenda cualquier acto de gobierno provincial que pudiera interferir con la equidad electoral, tal como exige el artículo 64 quater del Código Electoral Nacional respecto de la veda electoral. El Destape+1
- Transparencia absoluta sobre los “acompañantes” en los centros de votación: nombres, roles, autorizaciones, cámaras de vigilancia y sanciones para quienes infringen la normativa.
- Amplificar en redes sociales y medios nacionales este caso bajo hashtags y menciones para generar una presión social que haga visible el escándalo.


